Argentina vs Corea del Sur, por Mr. Luz

Mientras Mr. Luz siga sacando estos análisis brillantes lo mio pasa a segundo plano. Mucho detalle, mucha sapiencia. Acabo de inventar la etiqueta Mr. Luz.

17 / 06 / 2010

Argentina 4 - Corea del Sur 1

Goles: Chin Chu-Lin (en contra), Higuaín, Sal Chi-Chon, Higuaín, Higuaín.

La Figura: Higuaín


Romero (6): No usó los puños y se mostró seguro ante los débiles coreanos. No tuvo problemas. Salió a achicar hasta donde pudo en el gol pero no llegó a tapar. Para un arquero 100 % concentrado sus defensores también son rivales.

Jonás Gutiérrez (5): Respiró mejor. Levantó un poquito su nivel. Se sintió más acompañado por Maxi. Se hizo amonestar por tirarla lejos y se queda afuera en la próxima fecha por bobby. Esta vez el “Galgo” fue un cocker.

Demichelis (3): Hasta debió ser amonestado por la primera gran simulación del mundial. Echarle la culpa a una corneta es un bochorno. Su seña de “no escuché” no se la cree nadie. Todos vimos a Burdisso no solo gritándole sino haciéndole señas. Y todos nos dimos cuenta que quiso pararla displicentemente y se le escurrió debajo de la suela. Fue un error de atención y técnico. En el 2006 quedó afuera de la lista y pensó en quitarse la vida. Lo mismo pensamos todos esta vez. Un partido más de estos y debe salir.

Samuel (6) (x): Cayó el “Muro”. Igual, dignísimo mientras pudo. Hasta se animó a mostrarle mala cara al más grande de todos los tiempos por sacarlo de la cancha. Muy distinto a las carmelitas descalzas obedientes del 2002 que jamás se rebelaron ante las testarudas órdenes de un loco. Y muy diferente a ese señor de buzo rojo que pidió una camilla muerto de miedo en el 2006.

Heinze (6): Se lo ve firme siempre de frente a sus atacantes. Va fuerte en todas y a tiempo. La clave es que (por favor!!!) no pase al ataque. Su sociedad tiene que ser con Samuel y no con Di María. Se hizo amonestar por una mano innecesaria y no por una buena patada de las suyas. Igual, por las dudas, tiró la pelota lejos. Así no!

Maxi Rodríguez (6): Acomodó todo. Participó adelante, tiró al arco, centro en el segundo gol. Estuvo presente atrás complementándose con Jonás. Hizo todo lo que Verón tuvo miedo de hacer en el primer partido. O mejor dicho: se notó su presencia, no se borró. No le hace falta brillar, puede aparecer cuando el rival menos lo espera.

Mascherano (6): Otro partido normal del capitán. Buena marca y entregando bien y mal. Se banca el medio solo como ninguno y a él le encanta. No necesita ayuda por ahora. Es imprescindible, lo sabe y sin embargo se hizo amonestar. Llegó tarde y pegó fuerte. Todavía no hace falta pegar.

Di María (6): Se le calentó el pechito. Un cañito precioso y confianza para encarar. Probó al arco, habilitó al “Pipita”. Se fue un poquito del partido sobre el final. Tiene que crecer más. Igual, estuvo menos flaquito.

Messi (8): El mismo nivel que contra Nigeria pero con funciones diferentes. Esta vez no hizo tantas de las suyas pero se mostró más generoso, se asoció con todos los de arriba, tiró paredes con todos. Igual, en el primer tiempo dejó a todos los surcoreanos mirando la platea con un quiebre sensacional mientras él, a contramano, se la picaba al arquero a un costado. Mereció un gol. Otra vez no se le dio. Sin embargo participó en todos. La delicia por elevación a su verdadero amigo, el “Kun”, en el cuarto gol es amor al fútbol. No tiene por qué convertir contra Grecia. Si nos guiamos por la historia los goles de Mario y Diego llegaron en la recta final. Y Lio debe colarse en esa historia con goles importantes.

Higuaín (9)(xx): El banco pide pista pero al “Pipita” no lo presiona nada. Convenció a un par de técnicos, al mismo Diego y a mí… por ahora. Fue el mejor por efectividad y por estar donde tenía que estar. Su laburo lo hizo perfecto. Tres goles aunque ningún golazo. En el primero y el último conectó de cabeza eligiendo el lugar exacto, con imperfecciones pero bien de manual. El segundo, abajo del arco, el gol más sencillo de su vida. Tenía que convertir, tiene el 9 en la espalda, era su obligación. El gol lo necesitaba más él que toda Argentina.

Tevez (8) (xxx): Carlitos es el amigo que muere en la puerta del boliche hasta que lo dejan entrar y detrás de él pasamos todos. No se rinde nunca. La ausencia de Verón, como a todos, lo favoreció. No tuvo que bajar a volantear. Esta vez jugó de lo que más sabe, de delantero. El mejor del primer tiempo, lejos. Dejó la vida contra cuatro piernas coreanas antes de perder una pelota por la izquierda. Foul. Tiro libre y segundo gol argentino. Nos hizo gritar “uhhhhh…” y aplaudir en el tiro libre que pasó “así” del travesaño. Se la jugó Diego al sacarlo y salió bien. Si era por rendimiento no debía salir, pero el partido pedía un cambio. Esta vez le tocó a Carlitos. Es indiscutido. Es Carlitos.

(x) Burdisso (6): De lo que venga. El otro día de lateral derecho, ahora de central izquierdo. Las mismas ganas de morfar de siempre. Solo falta que reemplace a Mascherano. Le gritó a Demichelis, le hizo señas. Le faltó mandarle un e-mail. Todos los defensores son mejores que él, pero da la sensación que minutos más o minutos menos va a jugar siempre. Es un gran suplente.

(xx) Bolatti (6): Pocos minutos para hacer circular la pelota como él sabe. No tuvo ninguna exigencia de nada. Un cambio para que pise un rato la cancha. Pudo haber entrado cualquiera, daba lo mismo en un partido recontra liquidado.

(xxx) Agüero (8): El cambio más desequilibrante en lo que va de la copa del mundo. Cuando se dice que en la selección te dan 10 minutos y tenés que demostrar no es verso. El “Kun” hizo todo perfecto, aprovechando espacios y con velocidad. Como Carlitos, entiende que el dueño de la pelota es Messi. La primera que le llegó, la paró y lo buscó a Lío en la mitad de la cancha. La jugada terminó en el tercer gol. Se juntó con Messi y “Pipita” y, entre los tres, en un ratito liquidaron el partido. Hasta pudo convertir el quinto en una jugada con su sello. El papá de Benja es el mejor yerno de todos los tiempos.

DT: Diego Armando Maradona (8): No se puede negar que su selección sale a matar. Salvo los 15 iniciales del segundo tiempo fue todo de Argentina, que aún ganando buscó aumentar la diferencia. El laboratorio está a full, los dos primeros de pelota parada con fórmulas maradonianas. Realizó el mejor cambio del torneo, haciendo entrar al “Kun” después de una charlita con el “Negro” Enrique, pero sin dudas su mejor acierto fue despedir de la copa a Verón, quien dijo que podía jugar y, Diego, que sabe más que ninguno quién está para ponerse la celeste y blanca lo dejó afuera. Ya sabe que en la lista tiene a 22 fieras y a una gatita. En una tarde de goles y algunos lujos, el genio del fútbol mundial se llevó todos los aplausos. Amortiguó con el taco a la caprichosa Jabulani y levantó a todo el estadio. Un crack. Más allá de los Messi, los Mascherano, los Higuaín, los Agüero o los Tevez, Diego seguirá siendo el hombre más importante de la selección nacional… Siempre.